Arthur Conan Doyle fue médico de un ballenero en el océano Ártico, autor de libros históricos y de ciencia ficción, firme creyente en el espiritismo, amigo de Houdini, gran deportista y médico en tres guerras. Comenzó a publicar relatos de misterio por la necesidad de sacar adelante a su familia. Sin embargo, nunca estuvo satisfecho con el personaje que le dio la fama. Sentía que el tiempo y el esfuerzo dedicado a las aventuras de Sherlock Holmes había impedido que él, como autor, ocupara un lugar más importante en la historia de la literatura.