En este capítulo hablo sobre cómo la literatura y el audiovisual son a veces vasos comunicantes.
El éxito de una novela se valora en función de si se va a convertir en serie o película. Si es serie, mejor; si es para Netflix, el libro alcanza, en el imaginario colectivo, el Olimpo de los libros.
Este es un artículo que publiqué en el blog «A cara de libro» del Diario La Verdad.